Todos hemos oído hablar alguna vez del famoso entrenamiento funcional para el deporte; pero yo cada vez que veo a alguien predicar con el entrenamiento funcional me pregunto… ¿Funcional para qué? y la única respuesta lógica que encuentro es que cada entrenamiento será funcional para aquello que la persona vaya a realizar en su vida diaria, en su respectivo deporte o actividad, en nuestro caso el baloncesto.
El problema que se nos plantea hoy en día, es que tenemos los oídos llenos de “funcionalidad”, “especificidad” y miles de términos que desprestigian a ciertas modalidades de la preparación física, como el trabajo de hipertrofia y fuerza, ya que este trabajo se relaciona con el culturismo y el powerlifting; y esto asusta a la gente, que piensan que estas dos modalidades no tienen ninguna posible relación con la preparación física en otros deportes como el baloncesto.
Esto conlleva a que jugadores de todos los niveles deportivos, contacten con preparadores físicos y pidan un plan de entrenamiento “específico” para el baloncesto, sin llegar a comprender que para llegar a alcanzar ciertas metas, hay que realizar un trabajo muy genérico y “aburrido” para muchos, que es el trabajo de hipertrofia y fuerza.
Sin este trabajo previo, el margen de ganancia de explosividad, coordinación, etc… sera minimo;
En el cuadro inferior podemos observar como en una revisión realizada por Minetti and Zamparo, el área croseccional del músculo (tamaño muscular) está directamente relacionada con la capacidad de generar fuerza, y así mismo, esta capacidad para generar fuerza está directamente relacionada con la capacidad de producir.
(Adapted by the NSCA, from Minneti y Zamparo)
Tenemos que comprender, y hacer comprender a los atletas que la especificidad del entrenamiento es tan importante como la generalidad, es decir, desde cualquier deporte se ha de comenzar desde un plano más general, focalizandonos en la ganancia de masa muscular y de fuerza, y se debe ir progresando poco a poco hacia algo mas especifico.
En la tabla de arriba trato de mostraros esto de una manera mas sencilla, siendo el trabajo general, el trabajo de hipertrofia y fuerza (este trabajo tendrá ligeras diferencias según el deporte), y vemos como las líneas se separan de manera progresiva a medida que progresamos en nuestra periodización y comenzamos con trabajo de fuerza y potencia, hasta que llegamos al trabajo pliométrico y de aplicación específica al baloncesto.
El objetivo de este artículo es dar a entender que detrás de el trabajo especifico y más “divertido” que vemos realizar a deportistas de élite, hay un trabajo general que no se muestra debido a su monotonía, pero tenemos que realizarlo antes de incluir los ejercicios más específicos para el baloncesto, consiguiendo así mayores mejoras.
Rodrigo Alvira