Tendinitis rotuliana, causas y ejercicios excéntricos.

TENDINITIS ROTULIANA Y ENTRENAMIENTO EXCÉNTRICO

¿Diferencias entre tendinopatía y tendinitis?:

El término tendinitis que se conoce desde siempre, tal como indica su sufijo “itis” implica una inflamación. Desde hace tiempo que se conoce que en las patalogías que afectan al tendón, no hay inflamación del mismo. La inflamación cuando se da está alrededor del tendón. Por ello se ha acordado que “tendinitis” no es correcto, y debería llamarse tendinopatía.

¿Qué es la tendinosis y qué produce?

La tendinosis rotuliana, comúmente llamada rodilla de saltador, es un síndrome clínico de

dolor y disfunción en el tendón rotuliano.

Se localiza el dolor en la parte superior del tendón, que es la zona proximal de la unión del tendón con el hueso de la rótula. Este dolor se acentúa sobre todo en los gestos que más tensión produce al tendón, que son los saltos y los cambios de dirección.

Con mayor frecuencia afecta a jugadores de deportes de salto en su adolescencia, aunque afecta también a todo tipo de jugadores de distintas modalidades. Todo deporte que implique impactar, ya sea al correr, cambiar de dirección o saltar, puede generar una tendinopatía.

La rotura del tendón rotuliana es muy rara, estudios indican que solamente el 6% de las roturas de tendones en el cuerpo ocurren en el rotuliano, y ocurre en poblaciones mayores, sobre los 65 años de edad.

 

¿Por qué factores se produce?

Existen muchas factores que pueden desencadenar en una tendinopatía rotuliana. Podríamos clasificar los factores de riesgo de sufrir una tendinopatía en extrínsecos e intrínsecos

Factores extrínsecos

La sobrecarga es el factor más asociado con la aparición de este dolor. Esta sobrecarga la definimos como  la actividad por encima de lo que el tendón está preparado para soportar hasta ese momento. Puede ocurrir por un aumento repentino y sustancial del volumen/intensidad del entrenamiento, o un regreso de una lesión o un período vacacional sin un aumento gradual de este volumen/intensidad hasta adaptarse a ese ritmo de entrenamientos y partidos normales.

Esto suele suceder cuando el jugador no realiza una correcta readaptación tras la lesión sufrida, él o su entrenador quiere que vuelva demasiado pronto al ritmo normal de entrenamientos o partidos, y estas tendinopatías aparecen por consecuencia de no haber recuperado esas capacidades cognitivas, físicas y técnicas “perdidas” en el tiempo que ha estado lesionado y sin entrenamiento.

Por ello aconsejo que si has sufrido una lesión o un parón, realices un tiempo de readaptación, no vuelvas a entrenar o jugar “ a tope”. Esta readaptación tiene el objetivo de devolver al jugador lo antes posible al terreno de juego en la mejor condición posible, disminuyendo el riesgo de lesión o de una recaída en la misma.

Otro factores pueden ser el cambio en la densidad de la superficie de juego o entrenamiento, la que afecta a la capacidad de absorver los impactos del jugador contra el mismo. Entrenar en una superficie más dura, si el cuerpo no está adaptado a ello, puede provocar tendinopatías.

Durante el juego se podrucen aterrizajes y desaceleraciones, donde la energía debe ser absorbida por nuestro cuerpo. Esta energía se produce debido a las fuerzas de reacción que el suelo ejerce sobre nosotros cuando impactamos contra él, la cual es transmitida a lo largo de las estructuras anatómicas de todo el cuerpo.  (Todo esto lo veremos mejor en otra entrada sobre los aterrizajes y su importancia en el deporte).

 

Factores intrínsecos

Estos factores incluyen:

– Crecimiento rápido,  sobre todo jugadores jóvenes.

– Exceso de peso.

– Limitación en el rango de movilidad articular de las articulaciones del tren inferior (ROM)

– Discrepancia en la longitud de las piernas

– Tener la rótula demasiado alta o baja.

– Pies con hiperpronación (pisar hacia dentro), hipersupinación (pisar hacia fuera), cavos o planos.

 

– Poca masa muscular

– Mala alineación del tren inferior, valgo (rodillas orientadas hacia dentro) o varo (rodillas orientadas hacia fuera).

– La longitud y fuerza de los isquiotibiales y cuádriceps: acortamiento muscular, debilidad y descompensación.

Por ejemplo un limitado ROM en la articulación del tobillo, puede llevar a sobrecargas en el tendón rotuliano, ya que el tobillo no es capaz de realizar todo su trabajo “absorbente” y la rodilla tiene que paliar esta deficiencia, absorbiendo más carga.

Una musculatura de cuádriceps e isquiotibiales acortada ha sido asociada con las tendinopatías rotulianas. Un fortalecimiento muscular de estos, ha sido asociado con una reducción del dolor.

Al contrario, también se ha detectado que los deportistas que tienen una mayor fuerza en los extensores de rodilla y mayor capacidad de salto, tienen un mayor riesgo de sufrir tendinopatías.

Un excesivo arco en el pie, una reducción de la flexión dorsal del tobillo, asimétrias entre la longitud de ambas piernas y una posición de la rótula demasiado alta o desviada, son otros factores asociados con las tendinopatías.

¿Entrenamiento excéntrico?

El entrenamiento excéntrico es un tratamiento popular para la tendinopatía rotuliana. Numerosos estudios avalan su efectividad.

Los tendones tienen una estructura compleja, donde el elemento básico es la proteína de colágeno, encargada de soportar las fuerza de tracción del tendón.

El entrenamiento excéntrico se ha demostrado más beneficioso para paliar las tendinopatías que realizar un refuerzo muscular clásico concéntrico.

Este es debido a que las cargas mecánicas que producen en el tendón son diferentes. La contracción de tipo excéntrica mejora las propiedades del tendón, sobre todo la regeneración de proteínas como el colágeno, favoreciendo el crecimiento de tejido conectivo.

 

También provoca una mejora en la capacidad de absorción de cargas de la unidad músculo-tendinosa.

Esto quiere decir que aunque está demostrado que el entrenamiento excéntrico mejora estas molestias, hay que estudiar cada caso individualmente, detectando los factores intrínsecos y extrínsecos provocan ese dolor,  y determinar cuales ejercicios y rutinas son las mejores para cada jugador.

Lo que sí que parece claro, es que habría que añadir estos ejercicios excéntricos a las rutinas de los jugadores, para prevenir y paliar molestias de este tipo.

¿Debo dejar de hacer deporte si siento dolor?

Otra de las preguntas que podemos hacernos es si dejar de practicar nuestro deporte cuando sentimos dolor en el tendón rotuliano. Muchos autores (4) están a favor de seguir con la actividad, mientras el dolor no sea muy alto, y combinarlo con un trabajo de fuerza y ejercicios excéntricos, otros sin embargo, están a favor de cesar la actividad durante un tiempo y recuperar las cualidades del tendón mediante el entrenamiento excéntrico. Como hemos comentado antes, cada caso es individual.

 

Ejercicios excéntricos

A continuación os dejo un vídeo de mi canal de YouTube donde os enseño un ejercicio excéntrico para la tendinopatía rotuliana sin necesidad de ningún material. Se trata de una sentadilla, que podemos hacerla a una o dos piernas, en la que enfatizamos la parte excéntrica del movimiento, para conseguir las ganancias en las cualidades del tendón.

 

 

Bibliografía

  1. Jonsson P, Alfredson H. Superior results with eccentric compared to concentric quadriceps training in patients with jumper’s knee: a prospective randomised study. Br J Sports Med 2005; 39: 847-50.
  2. Frohm A, Saartok T, Halvorsen K, Renstrom P. Eccentric treatment for patellar tendinopathy: a prospective randomised short-term pilot study of two rehabilitation protocols. Br J Sports Med 2007; 41: e7.
  3. Bahr R, Fossan B, Loken S, Engebretsen L. Surgical treatment compared with eccentric training for patellar tendinopathy (Jumper’s knee). A randomized, controlled trial. J Bone Joint Surg Am 2006; 88: 1689-98.
  4. The Open Orthopaedics Journal, 2012, 6, (Suppl 3: M10) 553-557 553 1874-3250/12 2012 Bentham Open Open Access Eccentric Exercise Protocols for Patella Tendinopathy: Should we Really be Withdrawing Athletes from Sport? A Systematic Review Adnan Saithna*,1, Rajiv Gogna2 , Njalalle Baraza1 , Chetan Modi1 and Simon Spencer1
  5. Alfredson H, Cook J. A treatment algorithm for managing Achilles tendinopathy:new treatment options. Br J Sports Med.2007; 41: 211-216
  6. Koen H, Peers E, Lysens R. Patellar tendinopathy in Athletes. Current diagnostic and therapeutic recommendations. Sports Med. 2005; 35 (1): 71-
  7. Crossley KM, Thancanamootoo K, Metcalf BR, Cook JL, Purdam CR, Warden SJ.Clinical features of patellar tendinopathy and their implications for rehabilitation. JOrthop Res. 2007;25:1164–11758-
  8. Malliaras P, Cook JL, Kent P. Reduced ankle dorsiflexion range may increase the risk of patellar tendon injury among volleyball players. J Sci Med Sport. 2006;9:304–309.
  9.  Kujala UM, Osterman K, Kvist M, Aalto T, Friberg O. Factors predisposing to patellar chondropathy and patellar apicitis in athletes. Int Orthop. 1986;10:195–200.

Carlos Gracia Betorz

He sido jugador de baloncesto desde que tengo memoria, este deporte ha estado ligado a toda mi vida, ya que mi padre y hermano mayor eran jugadores. Tuve una lesión muy grave en la rodilla a los 20 años que terminó mi carrera como jugador, ya que tuve muchas complicaciones en la operación y recuperación. Desde entonces me centré en formarme para preparar a jugadores de baloncesto, buscando métodos de entrenamiento nuevos y eficientes, para ayudar a los jugadores a evitar situaciones como la que a mí me pasó, y también a aumentar su rendimiento mediante la mejoría física individual. Estudié Licenciatura de Ciencias de la Actividad Física y el Deporte, intentando profundizar siempre más en las materias que cursaba sobre entrenamiento, formándome por mi cuenta, dejándome asesorar por mis profesores e intentando ir donde hubiera profesionales con los que poder aprender. Tuve la gran suerte de poder realizar las prácticas de la carrera en el Club Baloncesto Murcia (actual UCAM Murcia), donde trabajé con la cantera y ayudaba al primer equipo de la Liga ACB. Tras esta etapa volví a mi ciudad, Cartagena, donde empecé a asesorar a equipos, clubes y trabajando individualmente con jugadores. A su vez, en verano, iba asistiendo a diferentes campus como preparador físico, además empecé a cursar el Máster de Rendimiento en deporte de equipo de la fundación Fútbol Club Barcelona. En esta etapa es donde empecé a crear mi sistema de preparación física para el baloncesto y mi marca personal Efficient Training. Uno de mis objetivos, era dar solución al gran problema que había detectado,y es que la preparación física que se aplicaba en el baloncesto, era una preparación convencional, de otros deportes o modalidades, la cual no era muy efectiva ni motivaba a jugador ni entrenador. Por ello mi idea fué crear un sistema de preparación física con una visión moderna y actualizada, una preparación física específica pensada para el jugador y equipos de baloncesto. Pero, sobre todo, un sistema de preparación física para el baloncesto real y aplicable. Con ejercicios y progresiones que estén adaptadas a lo que realmente tenemos disponible con nuestros equipos, las características y necesidades de los jugadores de baloncesto en la pista, y además, teniendo en cuenta el gran problema del limitado tiempo semanal de entrenamiento. Un sistema eficiente. Actualmente tengo 10 años de experiencia como asesor y preparador físico con jugadores, entrenadores y equipos de ligas profesionales y amateurs de todo el mundo. He dado clínics internacionales en sitios como Serbia, Portugal y México. He vendido libros y cursos en multitud de países. Puedo decir que soy un afortunado de trabajar en lo que me gusta, esto me motiva para seguir avanzando y aprendiendo cada día, actualizando así el sistema Efficient Training. Espero que te resulte interesante mi punto de vista y sistema de preparación física especifica para el baloncesto, ya seas jugador, entrenador o formes parte de un club de baloncesto. «Entrena movimientos, y no músculos»